viernes, abril 30

TE(A)MO

Tengo miedo de que estés en mis sueños, tengo miedo de no poder detenerme cuando digas "ven conmigo", temo perder mi fuerza de voluntad y hacerme volátil como una pluma en tu viento. Me angustia perderme, y que me encuentres. Temo volverme voluble, frágil...tuya. Pero te entrego esto, incluso hasta mis temores. A esto también temía, y ya lo estoy haciendo...A qué resistirme entonces?

Es demasiado tarde

Ya no queda alcohol en el vaso ni en el estante,
el dolor carcome desde adentro y me ahoga.
Todo porque el mundo vive en mi
y siento cómo se rompe a pedazos,
intento cicatrizarlo pero no puedo, cae y cae
el peso es mucho para mi espalda
y ver tu indiferencia me duele y no hay cura
no hay prozac que te cure
ni compasión que te salve.
Tu ignorancia es constante,
mi impotencia crece al verte
y al oirte el dolor aumenta.
¿Cómo cambiar el mundo si no cambias tú? 

Este texto es sólo el recuerdo de un recuerdo. Quise cambiar mi mundo por ti...pero cómo cambiar éste mundo si no cambiaste tú? IT'S TOO LATE 







DOS


Cada vez que no sentía el corazón latiendo en el pecho era por una razón, una tortuosa y bendita razón. Entregaba mi alma cuando amaba, y me devolvían sólo escombros de lo que un día fue una fortaleza. Pero yo lo decidía de esa manera, yo apostaba en un juego en donde sabía que perdería, y lo hacía con gusto. Después de todo... nunca me importó en qué condiciones quedaría mi mente después de decir un "te amo", después de todo el dolor que sentía cuando pisoteaban mi amor, yo me sentía de alguna manera bendecida. Pues luego de ese amargo sorbo de rechazo o engaño caía sobre mi una dulce lluvia que limpiaba mis heridas, no desaparecían, pero las refrescaba y con ello me sentía complacida. Qué culpa podría tener yo en querer regalar cada uno de mis suspiros? Yo sólo amaba...ya qué. NO HABÍA NADA QUÉ HACER. APRENDÍ A VIVIR CON ELLO.     Pero... era sólo con ciertas personas. Ellos, los dos... cada uno a su manera me destrozó la vida, cada uno contribuyó con la causa. ACABAR CON MI ALEGRÍA. LOS AMABA, SÍ! AMABA AMARLOS! PERO SUFRÍA!, y he llegado a pensar que amaba ese sufrimiento también.